Colección: prehnita

La prehnita es un mineral de silicato de calcio y aluminio hidratado, a menudo reconocido por su color verde pálido translúcido. Se forma en las cavidades y fisuras de rocas volcánicas máficas. La prehnita fue el primer mineral que recibió el nombre de una persona, el coronel Hendrik von Prehn, quien lo descubrió en Sudáfrica en el siglo XVIII.

En el ámbito metafísico, la Prehnita está conectada principalmente con los chakras del corazón y del plexo solar. A menudo se la conoce como la "Piedra de la profecía" o la "Piedra del sanador", y se cree que mejora la precognición, la percepción espiritual y la capacidad de prepararse para situaciones.

Emocionalmente, la Prehnita se considera una piedra del amor incondicional. Se cree que ayuda a calmar el medio ambiente y traer paz y protección. Se cree que su energía calmante alivia miedos profundos, ansiedad e inquietud, fomentando una sensación de paz interior y armonía.

A nivel personal, la prehnita se utiliza a menudo para el crecimiento y la transformación personal. Se cree que inspira confianza en el universo y aceptación de uno mismo y de los demás. También se considera una piedra para ordenar, y se cree que ayuda a dejar de lado las posesiones que ya no necesitamos o las viejas heridas emocionales y miedos que obstaculizan nuestro progreso.

Espiritualmente, se cree que la prehnita mejora el crecimiento espiritual, la intuición y la meditación. A menudo se utiliza para profundizar la conexión con la naturaleza y lo divino, promoviendo una sensación de unidad con el universo. También se cree que su energía mejora los sueños lúcidos y los viajes astrales, fomentando una experiencia espiritual más profunda.

En esencia, la Prehnita, con su calmante tono verde y su naturaleza translúcida, encarna la curación, la tranquilidad y la previsión. Sirve como guía en nuestro viaje de autodescubrimiento, animándonos a confiar en la sabiduría del universo y en nuestra capacidad de amar incondicionalmente.